domingo, 14 de febrero de 2016

Arpegios



Infinita sangre, 
de una sola sangre,
mi propio silencio
tierra
ocre, turquesa,
fresco
suelo,
tus frutos son
caricias, 
arpegios
que los astros 
exigen.
Refugio 
ocupado de caminos,
greda mía, 
el océano se mece 
donde el cielo 
y tus manos se unen

Eres lo que mis ojos 
ven.
Vivo 
está mi niño,
lo que mi boca toma
en la fuente
de tus labios
pulpa blanca 
chirimoya.

Palpo el recuerdo
piedra partida,
huella vital,
vocablo extemporáneo,
con las mismas manos
con las que escribo 
tu nombre
que  discierne
la conciencia.

Voz orgánica  
que te llama 
en secreto,
a tiempo y destiempo,
cómplice
tu cuerpo responde
a los dedos,
ay dulzura
con la que miraste
la luna,
aquella que 
tiene la forma
de mujer y el 
corazón de niña. 









 




viernes, 12 de febrero de 2016

Tu alegría


La muerte 
es mi muerte
si me despojas 
de tu alegría.
Renuncia la mañana
a ser llana. 
A la tarde le falta brillo
pan, oxígeno, alas
a las noches las lunas
en filas
bajo los labios 
calmos, a la vida
salmos.

Por favor,
no me exfolies 
tu alegría,
que mi piel
sin ella sangra
vetusto cansancio,
pudre su marcha
sin refugio,
se rinden 
de sentir el mundo
prisión sin muros,
esclavo sin sueños.

Los días se arrastran,
por las horas
inciertas, 
sin tu alegria,
no hay anillos 
ni saturno,
ni sol, ni tierra, 
solo un cuerpo
atomizado 
atraido al polvo
empujado a el.

Necesito
de tu alegría
que traspasa la noche
y el origen
que sabe a senda 
y oceano,
huele como flor
entusiasta primavera,
tu alegría suena
al big bang
y se expande sencilla
como el firmamento
en fragmentos
que cosquillean 
hasta el últimos 
de mis cuásares,
patria fresca
sin tu alegría
la muerte es mía.



 



 
 
 

 
 



 
 

 

lunes, 8 de febrero de 2016

Avanza



Avanza 
suelto por la ranura
de la sombra,
aseando el mundo,
oh lenguanje flexible,
pulso vivo 
puntada inmutable
rellenando la piel
a fuego lento.

Siento.
Hay algo 
en su mirada
que la hace mujer,
en todo caso 
mas moza,
y en su voz 
sutileza,
sobreviviendo al espacio
impulsada
por el lapso carnivoro,
este grato lapso
en el que me quisiste
sin cordones en los zapatos,
sin limaduras ni heridas,
con otros ojos,
esos que cauterizan
los abismos
Silenciosos.
Precisos,
atados al momento
en el que se despedazan
lo indiferente de lo sustancial,
vida, única oferta
sin mas mercado 
que lo que se demanda,
dientes, uñas clavadas
en la espalda de la noche,
sólo para sostener
tu corazón en mi.  


 









 


martes, 2 de febrero de 2016

Besos cúanticos


Lo admirable 
de un beso
es que germina 
antes de serlo,
cuando es, 
sólo el amor
lo interpreta, 
traduce,
aclara 
en una pura mirada,
manantial 
de agua fresca
y nada hay 
que los frene,
uno tras otro 
se levantan
vivificando 
el alma.

El beso 
me pone en la tierra
con labios y energía,
me sepulta y libera,
quema y enfría
hace de la piel 
poesía,
del sabor 
aventura
con olor 
nómada.

Lo asombroso 
del beso
es que no se apaga,
resplandor 
que prosigue
arrancando 
a los sentidos
sentido, 
al magnetismo
orientación, 
al misterio
evidencia, 
a la ciencia
inocencia, 
al jardín manzanas
de todos los colores,
desde los más 
íntimos,
silenciosos 
como el centro
de la galaxia,
hasta los que dejan 
rastro
con perfil 
de godecias.

Puede 
que algunos besos
duelan 
y dilapiden 
la esencia,
otros 
que se subasten,
y aquellos que salven,
que sepan 
a chocolate
palomita de maíz
o a la raiz 
de la muerte.

Mis beso 
son como el aire
despeinan,  
renuevan,
mecen 
la copa de los árboles, 
y a cada instante 
se descubren,
indómitos, 
exentos,
nunca sé 
como serán 
los siguientes, 
mis besos
no tiene edad 
ni lugar
y creo firmemente
que son cúanticos.





  




 


 






   


Luna de flores

En conjunción la luna, el ulular de la lechuza, las buganvilias de color abstracto,  su torso de hogaza y la noche de barro. Las translúc...