Rebosante mujer, fruta tolerante,
arte nocturno, piel de astro,
légamo y pan triturado,
besos de sábila des yodada,
no se pregunta si hay después,
sencilla dormita en el sillón,
donde la claridad misma
es noche oscura,
donde la noche oscura
es la misma claridad,
el resplandor se escinde
entre sus muslos,
no busca en el bote de basura
lo que le queda del corazón
desde una vetusta noche
el fango la toca con su razón,
soy a veces exacta imagen de la muerte
cuando ella es el testimonio de la vida,
los viernes se levanta luego de las dos,
reflexiona y dice todo es culpa de la gente,
amor es una aventura con fluidos y luceros
con escaso oxigeno para dos en pos de lo mismo
créeme que lo siento por interrumpir, irrumpir
en tu conciso universo de ríos y aldeas mínimas,
de relámpagos en el océano de mi ignorancia.
Indudablemente tiene su encanto y una estilo interesante
ResponderBorrar