No se presenta el sol
si no localizo esa luz que eres,
amplitud de cuantas pequeñas flores,
azul vasto despedazando extremos,
paulatina articulación de destellos,
y de paso admitir lo que causas,
aurora subiendo en tus ojos,
sabes bien lo que quieres,
¿para que tantos verbos?
si lo que ansío está en el alma,
mira como los arroyos cantan,
examino si la armonía y mis afectos
podría llegar algún acuerdo,
como pretendas, con el rumbo que pongas,
sobre mi cabeza tu talle de arco iris,
y el resto con lo que tropiezo
es un libre colmado de faltas,
tu secreto acorrala mis horas ignoradas,
en ti la tierra trova,
en mi interior te inventas,
y escucho todo lo que piensas,
respiro no porque abunde
si no porque me faltas
con tu boca de viento.
Tu poesía, amigo Alberto, me hace recordar los años juvenales... Es hermoso sentir cómo palpita el corazón y cómo lloran mis ojos...
ResponderBorraroh Anna, me conmueve tu comentario, gracias amiga
Borrar